domingo, 30 de junio de 2013

títulos


(imagen tomada de la web)

Se aceptan sugerencias, para una lectora voluntariosa:
 que me enamore desde la primer página.

miércoles, 26 de junio de 2013

este jueves un relato: la candidata



(imagen tomada de la Web)

Soñaron las alas, y las puertas se cerraron detrás de ella, fue caminando por un largo pasillo, mientras las imágenes de todas las palabras de estos últimos años, pasaban por el tamiz de un sentimiento que siempre estuvo oculto. Un sudor frío recorrió su cara, espalda, hasta el temblor en sus piernas. Tomo aire a modo de impulso y entro al salón, los acordes de un bandoneón la acompañaron hasta el centro, la sombra de los espacios vacíos la hicieron vacilar, igual, se acomodo a la altura de su querencia. Lo miro detenidamente y ante el primer abrazo, supo, que siempre y por siempre seria él, el candidato a caminar este Tango, y ella, sabe de esperar.



"Lo mas difícil del tango es caminarlo"
Juan Carlos Copes




en casa del Director, Gus, se buscan candidat@s 



                               

sábado, 15 de junio de 2013

acontece

Añoranza de tarde fría
las notas de una canción alumbra
los dolores
los no olvidos.
Palabras en cabriolas
se enredan en pensamientos
y se cuela por un instante
la risa, atrevida,
casi inocente,
de lo que nunca volverá.

El viento persistente
del recuerdo apaga los años
hacen huellas
heridas al caminar.

En el umbral de la nada
se va muriendo
esa manera linda de querer soñar...





martes, 11 de junio de 2013

este jueves un relato: el secreto que no te llevaras a la tumba






Era de mañana, muy temprano, cuando salí al balcón a colgar la ropa, me quede mirando el vapor que desprendía y el cielo de esa hora, tan limpio, inmaculado.
Me senté a pensar en los secretos, los propios, los que te hacen cómplice de guardarlo tan celosamente, porque el portador no puede con esa carga. ¡Que egoísta! Llenarte de tamaña responsabilidad.
Me gusta tanto esta hora, la ciudad no ha despertado todavía, hay un silencio especial, porque tiene el don de desperezarse.
¡Los secretos!, cuantas veces nos hemos visto víctima, de ese secreteo, enfrente tuyo, mientras quieren disimular que te enteres que se trata de ti. ¡Es muy feo, eso! Te hace sentir mal, y sobre todo si viene acompañado de la sonrisa socarrona, arrogante para terminar de fulminarte. Puedo hipotetizar, que conlleva maldad.
Por eso desde hace mucho tiempo que cuando alguien quiere contarme alguno les digo: ¡No, no lo hagas! pierde la magia de ser secreto.
Así, anduve mucho tiempo libre de no saber, los que otros se mueren por revelar.

Claro, hasta que apareció el, y nos hemos hecho cómplices de infinidades de secretos.
Mas, tenemos uno, muy guardado y reservado para las vacaciones de invierno.
Shhhhhhh, que nos han dicho, que ya estábamos grande para esto.
Pero por esta única vez, se los voy a contar y les pido encarecidamente que sean cómplices nuestros, olviden lo que dije al principio. Sean buenos.





el secreto que tenemos con mi Príncipe:





Otros secretos encontraran en casa de la sonriente y linda San







miércoles, 5 de junio de 2013

este jueves un relato: leyendas urbanas




En las madrugadas de las noches veraniegas, guitarras en mano, es donde crecen las leyendas, de boca en boca, acariciando cual brisa tibia que te envuelve e hipnotiza. El calor del fogón siempre es invitación, para que un nuevo amigo, se acerque. Así llego Gabriel, un muchacho muy bien parecido de ojos profundos. Las risas se hicieron fuente de expresión, mientras la bebida espirituosa iba circulando cual ritual entretejiendo canciones y rimas. Se extendió la noche más de lo que el tiempo abarca entre la puesta de sol y su salida, una estrella fija cual farol se mantuvo por más de un día y medio. El bosque vistió un camino que fue abriéndose hasta ellos, la magia abrió la puerta y todos entraron al castillo donde se celebraba un baile de ocasión, al traspasar el umbral sus vestimenta de verano fueron cambiando a hermosos trajes góticos, las tonalidades de grises, negros y pálidos pintaban los muros, y los únicos colores se reflejaban en las mascaras que adornaron sus rostros. Al amanecer no quedo rastro de lo vivido, y los jóvenes nunca mas volvieron a verle.

Cuenta mi madre, que le contó mi abuela, que todos los años los días 7 de junio se escuchan canciones, risas, y a la vera del árbol aparece una flor y una poesía, se sabe que una noche de 1913, fue hallada sin vida una joven hermosa, y ninguna investigación arrojo resultado de lo ocurrido.

Desde ese entonces el joven de ojos profundos pasea a la luz de la luna, buscando a su amada.


mas leyendas, encontraras en casa de Judith




sábado, 1 de junio de 2013

antes de mDorMir...

De alguna manera uno sabe cuando esta dormido y soñando. Un censor dentro de nosotros lo advierte. ¿Y cuando se esta muerto? …

El primer plano fue su cara, le siguió el sillón y la sala de estar. Fuimos novios por siete años me decía, mientras yo lo miraba atónita, tratando de disimular. ¿Será cierto? me pregunte. Intento recordarle, siete años no es poco tiempo, debería tenerle presente. Algo en su gesto me era familiar, algo que no encajaba, era su edad. Seguí con la mirada a la gente presente. Un espejo me descoloco y ahí comprendí, de todo lo incomprendido, yo no tengo la edad que gentilmente el espejo refleja. Algo no anda bien.

Fui hasta el baño a enjuagarme la cara; era amplio, las cortinas en color ocre, bailaban al son de la brisa que se colaba por la claraboya, algunas velas, esparcidas y un rico aroma a fruta, naranjas, como recién recogidas.

¿Por qué tantas flores?   

Seguí a la cocina, ¿Por qué no le recuerdo?, vi pasar a mi madre, también años mas joven, le acompañaba una señora. ¿Será la madre de mi novio por siete años? Abrí la heladera tratando de no parecer sospechosa de olvido. Me tranquilizo ver un Lemon pie, mi torta favorita, y otras tartas y comida de festejo, estamos festejando mi cumpleaños, supuse entre tanto, hoy es nueve de junio. Aunque tantas flores era raro. Si fueron siete años, hemos pasado mucho tiempo juntos, hay una historia, tiene que haberla…

Escuche a mi madre preguntarle por nuestra foto, el le respondió que estaba en su cuarto. Yo quise saber, ¿Cuál? La que caminábamos por la playa de San Bernardo, me contesto. O sea que tuvimos unas vacaciones que no recuerdo, amigos que no recuerdo y… desperté.
Desperté en el mismo sueño, paso sonriente a mi lado, el mismo demonio ¡y ya!  Todo paso a ser muy irreal.

Pero no pude contener el ahogo que me dio, cuando vi la tristeza en los ojos del novio de siete años al mirarme. ¿Le abre lastimado? Mi madre y muchos mas al mirarme, también reflejaban tristeza.  ¿Estoy muerta?

El amanecer me despertó, mire el calendario… respire profundo al ver a mi Gato acurrucado, con sus ojos celestes cual cielo de amor…


*Imagen tomada de la web