El tren del Olvido - Gabriel Nieto
Se sentó en el sillón mecedor con
una taza de café recién aromatizado, el día comenzaba a clarear, no había
podido conciliar el sueño, algunas cabeceadas no fueron suficientes. Sabía que
no perdería la costumbre, los pensamientos se presentarían de cualquier manera, cual pieza de un rompecabezas, siempre buscando una estrategia, una solución a la nueva investigación. Pero ya no
tenia que presentarse en ninguna escena, ni en ninguna reunión con su equipo, pero él, nunca dejaría de ser inspector. ¿Cuáles eran las nuevas pinceladas?
“Hay un
tiempo para vivir y un tiempo para morir”
Cerró las ventanas, tomó su cazadora y echó llave a
la puerta. Condujo su Peugeot hasta la estación y lo aparcó al final
de su camino, en la ventanilla, la señora que expendía los pasajes lo reconoció, él, con su decir tan lacónico le pidió un ticket de ida y subió al tren del olvido.
Me gusta imaginarlo, caminando
con su perro a orillas del mar, mientras Baiba va a su encuentro.
Una brisa suave de su
mar me toca para nunca olvidarle.
dedicado a Kurt
Wallander
historias detrás de las pinceladas en casa de nuestra amiga
Neogeminis
Nota: el inspector Kurt Wallander de la policía sueca, es el
personaje principal de una series de novelas (10 libros) del escritor Henning Mankell. Termine de leerlo hace poco, un personaje
entrañable. Aproveche estas pinceladas para despedirlo, aunque no de mi corazón.