Simona lleva toda la mañana en “el bar de las causas perdidas”, sentada
en su mesa preferida sin emitir sonido. No se ha quitado el barbijo, ni ha pedido
el desayuno. Es algo sospechoso, jamás de los jamases
suele quedarse callada.
Su amiga la observa preocupada, desde la barra mientras prepara los pedidos de los
pocos clientes que van llegando. Se acercó varias veces a ofrecer
el desayuno, y nada, ni siquiera la ha mirado. Por ese motivo, vuelve a la barra sin pena ni
gloria.
Cuando se escuchó las doce campanadas de la iglesia, Simona se levantó, camino hasta la barra y con una gran sonrisa miro a su amiga Laura y le entregó un papel. Camino de vuelta hasta la mesa y antes de sentarse, miro a todos los presentes, y gritó.
- ¡Me enamoré! Estoy con la soga al cuello.
- Eso es increíblemente… ¡Hermoso! Si, es definitivamente hermoso,
es para
alquilar balcones y gritarlo a los cuatro vientos. No entiendo, ¿de que soga hablas?
- ¡NO! Es terrible y nada de hermoso, Laura. Ya deja de hablar por los codos, y presta atención al listado que te di, y trae toda esa comida por favor. Acompáñame amiga, esta será como la última cena. Por cierto intermitente, estaba esperando que se cumpliera las horas de ayuno. Cuando te cuente vas a pensar … Que me falta un tornillo.
- Eso es lo único que ando entendiendo, pero mejor no aclares que oscurece.
- En realidad, te darás
cuenta que estoy entre la espada y la pared. Él es un personaje, de una
serie vieja que estoy mirando.
- ¿Y qué problema hay? Ya te dijo el Señor Darcy que tú eres tan de blog
como el de libro. Hemos viajado en el tiempo, y nos han visitado no hace mucho
los Argonautas. Hasta las diosas están de nuestro lado. A ponerse las pilas amiga y vamos por él,
¿Quién es el merecido personaje a enamorar?
-DEXTER
- ¡Ehhh! Te
pasaste de la raya…
mas expresiones en casa de Moni-Neogeminis