Había andado varios días por el camino que la hechicera le había
indicado, y en todas esas calles él se encontró con las versiones que alguno de
los identificadores le devolvía. Sediento por el agobiante calor, sintió que
sus fuerzas decaían. Al momento pensó que era engañado por una ilusión óptica al
ver el bar, casi desvaneciéndose llegó, y con la voz ronca y quebrada pidió un
vaso de agua, y otro, y otro más…
Algunos hombres se quedaron mirándolo. Cuando la fonola comenzó a
brindar sus primeros acordes, y la mujer que, sentada a su lado, cantaba. Mientras
se esparcía por el lugar las flores que el tiempo se había llevado, junto a los
versos y besos que se sostenían en sus recuerdos, sorprendiéndolo al saciar
su sed.
Esa imagen tan nítida le llevó a arrodillarse delante de la mujer, beso su
mano y apoyando su frente en ella, le pidió sin hablar que le concediera el
deseo de alcanzarla.
Ella, la madre de todas las diosas sin más le regalo un amuleto, que él
debía usar haciendo honor, a la oportunidad que se le presentaba.
Lo llevó consigo hasta que la idea de respirarla se le hizo realidad, después
de tres días de andar, pidió el deseo de parar el mundo. Entrelazaron sus manos
y no hubo tiempo que pudiera sacarlos de la maldición de estar eternamente condenados. Se miraron, y fue en ese instante que le cantó…
Me gustan mucho este tipo de relatos que escribes.
ResponderEliminarEs como el realismo mágico pero aún más mágico todavía.
Es un universo hermoso el que nos muestras.
Gracias.
Besos.
Muito belo o teu texto Ceci!
ResponderEliminarMas, qualquer que seja a forma literária, ela será sempre inacabada. É nela que começa a nossa busca, apaixonadamente procurada. Tudo é maior que o aparentemente concluído. A busca, essa é que é bela e nos fascina!!
Un buen domingo, Ceci.
Un abrazo :)
Me gusto antes y ahora y ese árbol de las lágrimas me sigue impresionando cada vez que lo leo. Un besazo .
ResponderEliminarQue imaginativa historia.
ResponderEliminarBesos.
Hola.
ResponderEliminarMe encanta este trabajo imaginativo sobre hadas y pentyhires, haciendo que mi mente siga mientras lo leo.
Saludos desde indonesia
Estos relatos tan oníricos me encantan. Una perla, sin dudarlo.
ResponderEliminarUn abrazo
Fantástico relato amiga Cecy, saludos.
ResponderEliminar-Solo ellos, saben la verdad que los ata eternamente a ese árbol de las lágrimas...
ResponderEliminarUn abrazo estimada Cecy
Hola, preciosa. Ya te he enlazado, y he publicado tu relato en la web de autores 😉
ResponderEliminarMuchísimas gracias por sumarte con tan bonita participación.
Un mágico y hermoso halo de misterio y magia, envuelve a tu historia.
Un placer haberme adentrado en este onírico mundo, con ese desenlace que conecta, magníficamente, con tu otro relato... Muy bueno, querida amiga.
Abrazos enormes, y muy feliz semana 💙
Un relato mágico, con un encanto muy especial, lleno de talento y bondad profunda.
ResponderEliminarUn encanto siempre leerte amiga Cecy.
Feliz día de la mujer , se muy feliz amiga.
Un relato muy imaginativo, me ha encantado.
ResponderEliminarAbrazos.