No conocía más allá de la isla donde había nacido, no sabía que había
detrás de esa inmensa masa de agua, salada, que lo cubría todo y limitaba con
el cielo. A veces sentía agobio de esa cárcel natural, que hubo un tiempo en
que fue tan feliz, y ahora, cada día la enfrentaba a la tragedia que su abuela
le confeso en su lecho de muerte.
Habían llegado con sus padres, su abuela y otras familias, cuando
pudieron escapar de las guerras bacteriológicas que se había esparcido por todo
el planeta, su padre alcanzado por el virus partió unos días después de haber
llegado, y su madre dándole la vida.
No se explicaron que protección guardaba esa isla que la llamaron “luces
de vida”, que pudieron sobrevivir todos estos años. Su nona con tanto amor y en
la soledad de los pocos que eran. Tan aguerridos para luchar por mejorar y
cuidar la especie.
En la triste soledad de una noche su abuela se le apareció en sueños, y
despertó repitiendo las palabras que le regaló, esas palabras que le cambiaría la
perspectiva “hay una energía muscular en la luz solar que corresponde a la
energía espiritual del viento” y así siguió ese día, repitiéndolas una y otra
vez.
Esa tarde caminaba por la playa, cuando vio a su amigo reparando la
embarcación que había estado anclada por los años que ellos portaban, se acercó
a pasitos lentos, pero decisivos. Y se sentó en silencio a contemplarlo. Sintió
el sol en su cuerpo y el viento al mismo tiempo refrescándola.
Fue en ese instante, que el tomó su mano, caminaron alrededor de la
embarcación, después de un rato en silencio, ella le dijo: "las velas son el espíritu de esta embarcación", el, la miro con adoración y
le dijo: "nuestra embarcación, nos llevara a recorrer nuestro camino", el
camino de la experiencia, que nos llevará más sabios a casa.
Ella se sintió emerger de la esclavitud a la
libertad, mientras las palabras de su abuela se hicieron luz.
Que bonito lo has hecho Cecy me gusto esta historia que aun estando en libertad se sentía prisionera en esa isl . Pero los sueños y el ímpetu están para algo lograr su objetivo. Muy lindo. Un beso y feliz viernes
ResponderEliminarHola Cecy que hermoso relato de libertad de fuerza y esa luz inspiradora como fuerza del espíritu.
ResponderEliminarUn encanto tus palabras amiga, un placer leerte.
Que bonito relato de luz y libertad. Saludos amiga.
ResponderEliminarCasi podríamos decir: basado en hechos reales, el virus ya está presente en nuestras vidas, tu has hecho una historia bella una necesidad de libertad dentro de la propia libertad. Abrazos
ResponderEliminarEs un relato que llena de esperanza.
ResponderEliminarY da envidia en estos malditos tiempos.
Besos.
Es un relato onírico pero realista. Muy bueno. Somos esa luz que rompe las cadenas, sean físicas o no.
ResponderEliminarUn abrazo
lUZ Y LIBERTAD PARECEN QUE VAN UNIDAS DOS PALABRAS QUE CAMBIAN EL ÁNIMO A CUALQUIERA.Lo digo en alto para que haya más luz en este rinconcito tan grato estimada Cecy.
ResponderEliminarLuz bella palabra...
Un beso y abrazo feliz finde.
Precioso relato. Saludos.
ResponderEliminarUna inspirada combinación de de distopía y de poesía, de alguna clase de búsqueda.
ResponderEliminarBesos.
Felicitarte y darte mis más sinceras gracias por tan bonita participación, querida Cecy.
ResponderEliminarUn bonito y emotivo relato que lleva implícito un hermoso mensaje.
Esa luz que le abrigó y guió; que le acompañó cual etéreo latido hasta encontrar la añorada libertad…
Precioso…
Millones de gracias…
Un abrazo grande, y muy feliz semana 💙
Hola Ceci. Que hermoso relato. Me encantou!
ResponderEliminarSó o amor, nos torna verdadeiramente livres...
Un abrazo e feliz semana!
El espíritu desea experimentar, conocer, si no, se siente preso.
ResponderEliminarTu simbólico cuento así lo deja entrever.
Me ha encantado tu contribución a la palabra "Luz". Original y profundo cuento.
Un abrazo :)
Ceci que relato tan hermoso,
ResponderEliminarademas de ser muy emotivo,
un placer visitarte.
Besitos dulces
Siby
la libertad contra la seguridad. mucho tiempo ganó la seguridad, ya tocaba dar una oportunidad a la libertad, quizás solo le faltaba un compañero
ResponderEliminarBesoss cecy
Emotivo relato lleno de luz. Bonita inspiración!! Un beso
ResponderEliminarMe ha gustado esta historia llena de nostalgia
ResponderEliminarBonita historia y sabía las abuelas, siempre aciertan. Besitos.
ResponderEliminarUn relato con mucho sentido Cecy, me ha encantado.
ResponderEliminarAbrazos.